Puños de harina, una reflexión sobre la masculinidad en el Teatro Villa de Molina
La obra Puños de harina se represerntará mañana martes 26 de septiembre a las 20:30 horas en el Teatro Villa de Molina. El precio de la entrada es de 5 euros. Puños de harina es un doble monólogo interpretado por Jesús Torres, autor, director e intérprete del espectáculo, con el que hemos hablado en Radio Compañía. A través de las historias de sus dos protagonistas, Rukeli y Saúl, marcadas por el racismo y la homofobia, propone una reflexión sobre la masculinidad y sobre la resiliencia ante las situaciones de adversidad. La obra, presentada en el John Lyon´s Theater de Londres, ha recibido cuadro candidaturas a los Premios Max y se ha alzado con el Premio Teatro 2019 AutorExprés de la Fundación SGAE y con el Premio Nazario 2020 a Mejor Espectáculo Festival Cultura con Orgullo de Sevilla.
Siguiendo la estructura de un combate de boxeo, la obra Puños de harina enfrenta en diez asaltos dos historias de forma paralela. Por un lado, descubriremos la historia real de Rukeli, el boxeador alemán y gitano que desafió al mismísimo Hitler en la época de la Alemania nazi. El capítulo más oscuro de la historia de Europa contada desde los ojos de un joven que sólo quiso lo que tantos otros, sobrevivir. Por otro lado, conoceremos a Saúl, un gitano homosexual que, en la España rural de los 80, busca su identidad e intenta sobrevivir en el seno de una familia tradicional.
Esta es la historia de cómo Rukeli, Saúl y otros gitanos, lucharon, resistieron, murieron y sobrevivieron al Holocausto y a la sociedad; pero también es la historia de cómo algunos hombres se esfuerzan por encajar en el concepto ideal de ser hombres de verdad, en un contexto que los rechaza por su raza u orientación sexual.
Rukeli vs. Saúl
Cuando se apagan las luces, el centro del escenario lo ocupa un luminoso cubo. Un cuadrilátero que contiene un microcosmos, el del boxeador y su contrincante. Su lucha es una danza en la que uno se mira en el otro. Del mismo modo, la obra Puños de harina se articula en diez rounds en los que alternativamente conocemos la vida de Rukeli, el boxeador gitano que le plantó cara al nazismo; y la de Saúl, un joven, gitano también, que ha crecido en la feria bajo el férreo puño de su padre.
Los dos tienen en común el boxeo y una vida nada fácil. Ambos tienen que encajar los golpes que les da la vida. El primero, el del racismo. El segundo, el de la homofobia. Y ambos encuentran el modo de ser ellos mismos, más allá de los estereotipos y de la violencia. La obra plantea así diferentes formas de vivir la masculinidad. Ese ser un hombre, que tantas veces repite el padre de Saúl, ¿qué significa?
Jesús Torres se consolida como dramaturgo con Puños de harina. Esta obra, que ha recibido numerosos reconocimientos, cuenta con un fecundo recorrido. Muchos conocemos a Jesús Torres por su labor dentro de El Aedo Teatro, compañía dedicada al teatro escolar y que lleva años realizando representaciones para institutos. Ya nos deleitó con su imprescindible Miles Gloriosus o con su personalísima adaptación de La Odisea, por mencionar algunas. Si por algo se caracteriza su trabajo es por su excelente calidad, por su capacidad para fascinar a los jóvenes y por tener la clara vocación de promover valores. Otelo en la red nos habló del acoso escolar. Puños de harina pone el foco en la masculinidad, la homofobia y el racismo.
En su búsqueda por acercarse a los más jóvenes y de experimentar con recursos más allá de lo puramente escénico, Puños de harina, se acompaña de un videojuego que sirve para concienciar sobre los valores que transmite la obra y que la hacen óptima para trabajar en un contexto escolar. El Aedo es una compañía que habla el lenguaje de los adolescentes y cuyo mensaje cala en ellos profundamente. Esta, como todas sus obras, son altamente recomendables para todos, pero especialmente, para los más jóvenes. Que no se la pierdan.
Texto, dirección e interpretación: Jesús Torres
Voces en off: Eva Rodríguez, Antonio M.M., David Sánchez Calvo
Diseño de iluminación: Jesús Díaz Cortés
Técnico de iluminación: Alicia Pedraza
Videoescena: Elvira Zurita
Escenografía: Jesús Díaz Cortés y Jesús Torres
Vestuario: Mario Pinilla
Espacio sonoro y música: Alberto Granados Reguilón
Coreografía: Mercé Grané
Entrenamiento personal: Diana Caro
Entrenador de boxeo: Nelson Dotel
Diseño gráfico: José Ponce de León
Fotografía: Moisés F. Acosta
Jefa de prensa: Raquel BeriniTécnico de sonido y vídeo: Antonio Villar