«La ropa que se prueban los clientes pasa por una máquina de ozono, se plancha y al día siguiente vuelve a tienda», Paqui Gomariz de Notthingam

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Nos encontramos en esos primeros de fase 1 de la llamada desescalada del confinamiento al que nos ha llevado la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Una fase que todavía plantea ciertas inseguridades a compradores, especialmente en algunos sectores menos prioritarios. En este caso, hablamos del sector textil y lo hacemos con Paqui Gomariz de la tienda de moda Notthingam. Paqui nos cuenta que «viene poca gente porque están asustados, a parte, la ropa es algo que no es de primera necesidad… pero bueno, el cliente va cumpliendo». Estos días se está adquiriendo ropa de temporada, principalmente, dado que el confinamiento nos pilló en una estación fría y ya estamos prácticamente en invierno.

Por otro lado, Paqui nos cuenta cómo han adaptado el protocolo frente al contagio. Un protocolo que llevan a cabo desde la entrada en la tienda, ya que justo en la alfombra de la puerta de acceso se pulveriza una mezcla con agua y lejía. Además, se lleva a cabo la desinfección de manos con gel hidroalcohólico y el uso de guantes y mascarilla. En cuanto a ropa que se prueba la gente, pasa a una máquina de ozono, más tarde se plancha y, al día siguiente, vuelve a ser expuesta.

Paqui Gomaríz, propietaria de la tienda de ropa Notthingam

 

 

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