Los daños ocasionados por las lluvias torrenciales superan los 15 millones de euros

La junta de gobierno ha aprobado una solicitud a la Delegación del Gobierno en la Región de Murcia para la declaración del término municipal de Molina de Segura como zona catastrófica, a consecuencia de los daños ocasionados por las lluvias torrenciales del mes de mayo, daños estimados que alcanzan los 12.852.792 euros.

Asimismo se ha trasladado a la Delegación del Gobierno en la Región de Murcia la valoración de daños ocasionados en los servicios municipales como consecuencia de las lluvias torrenciales producidas el día 25 de mayo y días siguientes. Las estimaciones de daños a priori, en base a las tareas realizadas y desperfectos observados en distintas calles y caminos, así como en instalaciones municipales, ascienden a un total 3.052.792 euros.

El 25 de mayo se vieron afectadas decenas de casas por los daños causados por las lluvias torrenciales. Muchas de ellas quedaron inundadas y los efectos aún persisten . El barro sigue haciendo inaccesibles varios caminos y las parcelas de muchas casas de la Huerta Abajo, Huerta Arriba e Hijuela. La asociación de vecinos que aglutina a estas tierras huertanas registró el pasado 26 de mayo un escrito dirigido al Ayuntamiento, que incluye diez puntos en los que exponen su preocupación por las perversas consecuencias que tienen los episodios de lluvias intensas, reclamando soluciones.

El citado jueves 25 de mayo, desde que se desbordó la acequia, la escorrentía apenas tardó tres cuartos de hora en inundar sus viviendas. Ese día los bomberos, Protección Civil y agentes de Policía Local acudieron al rescate de quince personas que residen en la huerta. “Nunca se ha visto que tarde tan poco tiempo en llegar el agua”, sostienen los vecinos.

Estas zonas de huerta, situadas entre el casco urbano y la pedanía de El Llano, son de las primeras víctimas de los daños que han causado las Danas en los últimos años. Muchas viviendas se encuentran en el trayecto de una rambla, por lo que el agua procedente de Cañada Morcillo arriba a sus casas con gran virulencia, ocasionando numerosos daños materiales en las mismas, al igual que en sus cultivos domésticos.