La Procesión de los Niños abrirá el 26 de marzo la Semana Santa de Molina

 

 

La Procesión de los Niños volverá a lucir el 26 de marzo por décimo sexto año. Este viernes se ha presentado el cartel anunciador, una instantánea de Raimundo de los Reyes en la que se ve la imagen del Niño de la Pasión, del escultor Bernabé Gil, de la Cofradía del Santo Entierro, que procesiona junto a las otras cinco Hermandades, en la que será pistoletazo de salida a la Semana Santa Cofrade molinense.

Francisco Hernández, presidente de la Procesión de los Niños

Esta procesión está integrada únicamente por niños y organizada por el Cabildo Superior de Cofradías Pasionarias de Molina de Segura. Tendrá lugar el domingo 26 de marzo, a partir de las 18.00 horas, desde la Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción.

Almudena Cascales, nazarena negra y jefa de procesión de la Cofradía del Santo Entierro

 

Desfilarán en torno a 300 niños de la Ilustre, Venerable y Antiquísima Archicofradía del Rosario y de la Resurrección y de la Venerable Cofradía del Santo Entierro. Cuatro imágenes integran el desfile procesional: Niño de la Pasión (obra del escultor molinense Bernabé Gil); Nazareno de los Niños (de Ramón Cuenca); Cristo de la Encarnación (de autor anónimo); y Virgen del Primer Dolor (de la escuela de Salzillo, del siglo XIX).

Antonio Jesús Lax, nazareno blanco de la Cofradía de la Resurrección

 

La procesión parte de la Plaza de la Iglesia de Ntra. Sra. de la Asunción y continúa por Calle Ramón y Cajal, Plaza de la Constitución, calles Cultura, Mayor y Santa Teresa, Paseo Rosales, Plaza de la Región Murciana, calles Cultura y Pensionista y regreso a Plaza de la Iglesia, con llegada a las 21.00 horas, aproximadamente.

La Procesión de los Niños es una de las más consolidadas y de más repercusión de cuantas se celebran en la Región de Murcia. Imágenes de grandes escultores portadas por niños estantes y acompañadas por grandes filas de niños nazarenos. Niños que entre risas y juegos despiertan su vena cofrade y abren el futuro prometedor de la tradición más arraigada de Molina de Segura.

Daniel Pellicer, párroco de la iglesia Sagrado Corazón de Jesús