Grupos de consumo. El camino hacia la soberanía alimentaria

 En Noticias

Esta crisis sanitaria y el confinamiento, del que poco a poco vamos saliendo, nos está dejando tiempo para pensar. Tiempo para pensar en nuestra forma de vida previa a la crisis y en nuestros hábitos: laborales, familiares y también en nuestros hábitos de consumo. El autoconsumo y la soberanía alimentaria es algo de lo que ya se venía hablando mucho antes de esta pandemia pero, ahora, con la escasez de mano de obra de las grandes cosechas agrarias, las condiciones de los trabajadores del campo o las dificultades de los proveedores para abastecer algunas superficies, ponemos la mirada en lo local y en los productos de proximidad.

Consumo Agusto es un grupo de consumo creado en 2016 entre las localidades de Molina de Segura y Alguazas. Lo forman una veintena de familias que se coordinan para comprar productos de alimentación directamente a pequeños agricultores y productores con la intención de eliminar los intermediarios y comprometerse con un modelo de consumo basado en 3 ejes. Como nos cuenta María R. A, integrante de este grupo, con este proyecto <<lo que pretendemos es alcanzar la soberanía alimentaria, alejarnos de las grandes superficies y acercarnos a los pequeños productores>>. Para ello, se basan en un consumo ecológico y de temporada que respete la diversidad de los cultivos y el cuidado del suelo, una vuelta al origen de los cultivos tradicionales que les permita, además, un consumo más saludable. También creen en el consumo local y de cercanía por una coherencia ecologista, <<por mucho que un producto tenga una certificación ecológica si tiene que recorrer mucha distancia para llegar a ti, ya no es ecológico>>, no podemos olvidar el impacto medioambiental que el propio recorrido pudiera ocasionar. Pero también persiguen este modelo por una conciencia de clase y como apoyo al tejido productivo del país , <<es importante pagar un precio justo y digno a los productores y que estos, a su vez, se lo paguen a sus trabajadores>>. Además de lo anterior, desde este grupo de consumo también apuestan por el trato humano y de cercanía. Mantienen un trato directo con sus proveedores e, incluso, organizan jornadas de convivencia para conocerse.

Este proyecto consigue materializarse a través de la plataforma «Estraperlo Sociedad Cooperativa Integral»  en la que se ponen en contacto las familias y los productores. Desde la plataforma realizan pedidos conjuntos de alimentos frescos y no perecederos a diversos agricultores y productores. Compran verduras, frutas y hortalizas pero también harina, especias, vino ecológico u otros productos no perecederos como los productos de limpieza. Para el reparto, se reúnen quincenalmente en la Casa del Pueblo de la pedanía de El Llano de Molina y, desde allí, organizan y distribuyen los pedidos. <<Ahora mismo hemos conseguido un equilibrio muy bueno de productos, con proveedores que se complementan entre sí>>. Y aunque no es una cuestión de ahorro económico, también en ese sentido, este modelo les permite ahorrar algo de dinero con respecto a la compra de productos ecológicos que pudiéramos hacer en grandes superficies. Para que nos hagamos una idea, en casa de Maria que son 2 personas el gasto mensual aproximado que les suponen estos pedidos es de 120 euros.

Este grupo de consumo ha ido creciendo gradualmente desde que se creó y María está convencida de que lo seguirá haciendo, << en el punto en el que está ahora mismo la sociedad, con el cambio climático y la conciencia ecológica que hay, es algo que se iba a ir reforzando de forma natural>> pero quizá esta crisis pueda servir para ganar conciencia. Lo que tiene claro es que <<si no cuidamos el producto local, si no se establece una red de consumo de este producto, tenderá a desaparecer frente a los grandes competidores>>. María insta, por ello, a las diferentes administraciones a que fomenten y faciliten este modelo de consumo, << la responsabilidad no puede recaer exclusivamente en un grupo de personas que se organiza de forma particular, las administraciones también deberían impulsar este modelo>>.

Durante el confinamiento y por cuestiones logísticas que les impiden reunirse con normalidad, Consumo Agusto ha paralizado temporalmente la admisión de nuevas personas al proyecto. Cuando esto pase, el grupo está abierto a la incorporación de nuevas familias que se quieran sumar a esta otra forma de consumir.  Quizá la compra no resulte tan cómoda como hacerla en una gran superficie pero, sin duda, estaremos apostando por nuevas formas de consumir; más cercanas, más justas y más sostenibles. Para poder entrar en contacto con ellos basta con escribir un correo electrónico a consumoagusto@gmail.com

Empezar a escribir y pulsar Intro para buscar

WhatsApp chat