Esther Clavero deja la alcaldía de Molina de Segura
Esther Clavero ha dimitido como alcaldesa de Molina de Segura, después de que el PSRM y ocho de los doce ediles socialistas de Molina difundieron un comunicado en el que exigían su renuncia
El PSRM-PSOE le abrió expediente disciplinario y la suspendió de militancia cautelarmente y, después, la ejecutiva federal que lidera Pedro Sánchez exigió su renuncia al cargo; el resto de partidos, incluido Podemos, su socio de gobierno, pidieron también su dimisión, y, finalmente, anoche ocho de los doce ediles que forman el grupo municipal socialista firmaron un escrito, respaldados por el PSRM, en el que retiraban su apoyo a la alcaldesa.
Minutos después de difundirse este comunicado, pasada ya la medianoche, Clavero hacía pública su carta de renuncia. «Me despido desde la tristeza, y el abatimiento de haber sufrido un linchamiento sin precedentes que ha dañado a mi familia, y a mi persona», señala en su escrito.
En el comunicado, de tres folios de extensión, la ya exalcaldesa admite que su vacunación fue una equivocación y se presenta como una víctima. «Cometí el error de vacunarme cuando me llamaron desde mi centro de salud porque consideraron, que al ser paciente de riesgo, y estar altamente expuesta, iba a ser lo mejor para mí. Ese es el máximo delito que he cometido en mis 43 años de vida», agrega.
Ocho concejales del PSOE
Los ocho ediles que desencadenaron la renuncia de Clavero al retirarle su apoyo son Ángel Navarro García, José de Haro González, Julia Rosario Fernández Castro, Miguel Ángel Cantero García, Andrés Martínez Cervantes, Soledad Nortes Navarro, Juan Antonio Cantero Nicolás y Eliseo García Cantó.
El escrito que lleva sus firmas señala que «ante los hechos acaecidos en los últimos días, que han revelado que Esther Clavero Mira no cumplió el protocolo de vacunación, los concejales socialistas de Molina de Segura, comprometidos con el cumplimiento de las normas que regulan al PSOE, pedimos su dimisión como muestra de lealtad a la organización política y, por encima de todo, a los vecinos y vecinas que representamos».
Fuentes de la ejecutiva regional socialista aseguran que de los tres concejales que no firman el comunicado, Fuensanta Martínez, Montserrat Montanos y Sandra Díez, dos seguirían en la corporación aunque Clavero dejara la alcaldía, por lo que solo una mantendría el respaldo inquebrantable a Clavero.
El escrito se produce horas después de la reunión telemática del sábado de Clavero con miembros de la ejecutiva local del PSOE y del gobierno municipal, y que la alcaldesa quiso aprovechar para lograr una salida airosa. «Todo era un despropósito», comentó el vicesecretario general y portavoz del PSRM, Francisco Lucas, sobre las propuestas barajadas por Clavero de dejar su cargo pero seguir como concejal no liberada, y de que se realizara una encuesta en el municipio para elegir a su sucesor.
El mismo sábado por la noche, tras la reunión referida, el secretario general del partido, Diego Conesa, y el secretario de Organización, Jordi Arce, volvieron a ponerse en contacto con Clavero para reiterarle que la única salida posible era su marcha.
Ante la resistencia mostrada por la alcaldesa, la ejecutiva socialista reaccionó ayer aglutinando el malestar creciente en su contra dentro del equipo de gobierno municipal y difundiendo el comunicado de la mayoría de sus concejales exigiéndole la dimisión.
COMUNICADO DE RENUNCIA DE ESTHER CLAVERO COMO ALCALDESA DE MOLINA
Me dirijo a los ciudadanos y ciudadanas de Molina de Segura que es a quienes
me debo y a quienes he representado con mucho orgullo desde su apoyo
mayoritario en las últimas elecciones municipales. He representado con mucho
honor a ciudadanos y ciudadanas que confiaron en un proyecto por el que desde
la máxima honradez, honestidad y transparencia he intentado desarrollar hasta
donde me han dejado.
Ahora me despido desde la tristeza, y el abatimiento de haber sufrido un
linchamiento sin precedentes que ha dañado a mi familia, y a mi persona. He
trabajado por mi partido, y por mi ciudad y sin descanso desde muy joven. He
sacrificado muchas cosas, mi vida personal, familiar y social, pero lo he hecho
desde el convencimiento y la fortaleza de que cambiar la sociedad, y mi propia
organización era imprescindible.
La política para mi, no es un medio para asegurar mi existencia. Nací en una
familia humilde, y la sociedad que crearon nuestras madres, nuestros padres,
nuestros abuelos me permitió, que desde una familia monoparental pudiese
progresar en la vida, hasta llegar a un puesto de responsabilidad como el que
hasta hoy he ocupado. Jamás he olvidado mis orígenes a la hora de atender las
necesidades de la gente. Espero, y por eso seguiré luchando desde donde esté,
que los hijos de los humildes puedan tener las mismas oportunidades que yo
tuve, y seguiré luchando con fuerza para que mi hijo tenga una vida más fácil
que la mía.
No he robado, no he prevaricado, no he malversado, no estoy procesada ni
imputada por ningún caso de corrupción. No he cometido ningún delito, no he
mentido. Nunca he pisado un juzgado. Me he vacunado, sí. Cometí el error de
vacunarme cuando me llamaron desde mi centro de salud porque consideraron,
que al ser paciente de riesgo, y estar altamente expuesta, iba a ser lo mejor para
mí. Ese es el máximo delito que he cometido en mis 43 años de vida. Y por ese
delito abandono este proyecto que he liderado y que considero apasionante.
La política como un intercambio de locuras debe terminar si realmente queremos
que los agotados, los desilusionados, los decepcionados se sumen y conecten
con sus instituciones. Creo, que solo desde la humanidad se puede hacer crecer
a las ciudades, a los pueblos, y a la sociedad. Tomar decisiones e intentar
ordenar lo que ya ordenaron los ciudadanos, respondiendo a la inmediatez de
los medios o de las redes sociales, pretendiendo así dictar sentencias desde las
emociones más viscerales y los sentimientos, destrozando a personas, no es la
política que quiero hacer, ni la que quiero vivir.
Quiero una política más humana, quiero ejercer el poder de otra manera, con
humanidad, con solidaridad, con amabilidad, con consenso y participación, pero
con la contundencia de la justicia social en la que creo.
Lo que siento más cierto es, que de esta forma, seguiremos alimentando la crisis
de legitimidad de la democracia, y eso tiene consecuencias indeseables para el
devenir de las sociedades democráticas actuales. Estamos alimentamos el auge
de los populismos.
Me duele en extremo lo externo, pero más me duele lo interno. Agradezco a
todas las personas que habéis estado a mi lado con lealtad para intentar buscar
mesura ante esta locura, doy gracias a los molinenses que tantas muestras de
apoyo me habéis mostrado a lo largo de estos días y que me han insistido para
que ante esta injusticia, aguantase, porque no todo vale en política, y porque el
tiempo pone cordura a las cosas.
Siento no poder cumplir vuestro mandato, pero me debo a un partido que ha
tomado esta decisión, y fallaría a mis principios, resistiendo ante las decisiones
de órganos superiores. “Las guerras terminan cuando los vencedores imponen
a los vencidos su propia regla decisoria” dice Sartori. Además de que no puedo
ver sufrir a mi familia.
A todos los grupos políticos, decirles que es posible profundizar en nuestra
democracia a través de la participación ciudadana, que nunca olviden esto,
porque en la base de la democracia está gobernar debatiendo.
A los ciudadanos, a las asociaciones, a las empresas, a los funcionarios de esta
casa, darles profundamente las gracias, porque me han dado más de lo que yo
nunca pueda darle a ellos. Seguiré con ellos, luchando pero otra manera.
Y termino con un mensaje de una molinense, y que resume todo lo hecho y por
lo que me siento suficientemente satisfecha en esta etapa de mi vida en política:
“Molina no solo es ejemplar en la gestión del covid, lo es por muchos motivos
más desde que aterrizaste con tu ilusionante proyecto. Tu no solo haces política
Esther, tu generas un orden de vida local distinto. Dónde había un pueblo
dormido, hoy encuentras en su gente emoción por construir, a veces mediante
la crítica, es cierto, ¿pero qué mejor señal para comprobar que la pócima
funciona?
Si la gestión publica ha de tener un objetivo, ese es el de la educabilidad
ciudadana y la crítica, forman parte del proceso. Cuando una planta crece
siempre agrieta la tierra antes de florecer… Para mi eres ante todo profesora y
eso nunca lo dejarás de ser, el rol político siempre es coyuntural, y tal vez
analizar toda esta situación desde esa perspectiva docente hará que se convierta
en lo que realmente es: un aprendizaje más, que inevitablemente pasará.
Como ciudadana de Molina te rogaría q te quedases”.