Molina está cumpliendo con los plazos y medidas que exige el Gobierno en materia de zona de bajas emisiones, según afirma el concejal de movilidad
El pasado lunes 1 de julio terminaba el plazo establecido en el decreto que regula el establecimiento de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Desde el Ministerio de Transportes, según arrojaba la prensa esta semana, se amenaza con retirar las ayudas al transporte público a los ayuntamientos que no pongan en marcha las actuaciones necesarias para implantar las Zonas de Bajas Emisiones antes del próximo año. En la Región están obligadas a establecer limitaciones al tráfico que permitan mejorar calidad del aire y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero las cuatro ciudades que superan los 50.000 habitantes, siendo estas Murcia, Cartagena, Lorca y también Molina de Segura.
Según explica Antonio Martínez, concejal de Movilidad de Molina de Segura ante los micrófonos de Radio Compañía, los deberes exigidos por la normativa que contempla la ley de cambio climático y transición energética y sus posteriores modificaciones, se está cumpliendo en nuestro municipio.
La mencionada ley, continúa el edil, exigía tener iniciadas las medidas de adaptación cuando se alcanzase el mencionado plazo y Molina de Segura ya tiene delimitada zona de bajas emisiones, de hecho contempla las Avenida de Granada, Madrid, Calle Mayor, Calle Sancho Panza y la unión con toda la Avenida de la Industria. Pero además, ya está en marcha el proyecto con el que tomar medidas en caso de que haya episodios de contaminación, de modo que se puedan revertir o rebajar los niveles de contaminación en ese momento. Sin embargo, recuerda Martínez, los medidores ofrecen niveles «verdes», salvo en episodios puntuales con la llegada de polvo sahariano. Además, se está llevando a cabo plantación de arbolado, implementación de líneas de autobús interurbano,… de manera que mejore la calidad del aire en la localidad y se rebaje el nivel de contaminación.
Asegura Martínez que, a falta de colocar las señales que delimiten la ZBE, queda pendiente ejecutar un par de obras en el Barrio San José y en la zona del IES Vega del Táder. El resto «prácticamente estaría todo hecho». Unas medidas que se podrán realizar hasta el 31 de diciembre de 2024 tras la prórroga solicitada en julio del pasado año y aprobada por el gobierno en noviembre.
El concejal de movilidad insiste en que lo importante es «que el centro de Molina de Segura no muera y que cualquier persona pueda venir aquí». En ese sentido, subraya que la propia ley contempla excepciones y, desde la concejalía, se ha desarrollado un listado con las que serían aplicables a nuestro municipio, acotando las posibilidades que deja la ley de adaptación en función de cada población. De tal manera que los vecinos que vivan en las ZBE y dispongan de un vehículo antiguo sin pegatina, no tengan problemas para moverse por el centro. Otro ejemplo sería el de vehículos comerciales, de mercancías, de reparto de caudal público,… que necesiten acceder al centro, afirma, «no vamos a poner palos en la rueda en aquellos que tienen que trabajar».
Además de la campaña activa que encontramos en la página web de movilidad, hay otra campaña prevista con la que gestionar la información que se va a dar a todos los vecinos antes de ejecutar la ordenanza para que todo el mundo esté al tanto antes de iniciar con el plan exigido por la normativa estatal.
En cuanto a las sanciones, asegura Martínez, «no hace falta sancionar para ciertas cosas» y, continúa «nosotros vamos a hacer todo lo posible, en un 99%, vamos a hacer que no se sanciones porque teniendo medidas correctivas, no siempre es necesaria una sanción».
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