El Ayuntamiento reconoce la labor de treinta personas que han colaborado en la “exitosa” feria de las tradiciones

El salón de plenos del Ayuntamiento de Molina de Segura acogió este jueves por la noche el acto de reconocimiento a las personas que han colaborado en la organización y realización de la V Feria de la Tradiciones, que fue visitada por más de 15.000 personas y resultó “todo un éxito”, según los organizadores.
El alcalde, Eliseo García Cantó, resaltó que dicho acto es “oportuno y necesario para expresar nuestro agradecimiento a todos los colaboradores”. Y puso el énfasis en que, desde que tomó posesión como alcalde el 10 de febrero de 2021, una de las decisiones que más satisfacción le ha producido es trasladar dicha feria al barrio del Castillo, un evento que este año ha estado dedicado a la figura del panadero.
Es el segundo año de las cinco ediciones celebradas que el citado barrio alberga la Feria de las Tradiciones, tras realizar las tres primeras en Plaza de España. Entre la treintena de personas que recibieron un galardón de manos del regidor y del concejal de Artesanía, Andrés Martínez, estuvo el presidente de la asociación de vecinos del Castillo, David Marcos, quien no dudó en admitir que “todos los vecinos estamos encantados por haberle devuelto la vida al Castillo y así podemos repetir cuantas veces quieran”.
Representantes de asociaciones, investigadores, personas mayores, panaderos y trabajadores municipales, entre otros, tuvieron su momento de gloria en el acto celebrado en el Ayuntamiento. La última persona en recibirlo fue la funcionaria que ha coordinado la feria, Lourdes Bernal, que fue ovacionada por un salón de plenos repleto de público.
Por su parte, el concejal de Comercio, Artesanía, Turismo y Fiestas Locales, Andrés Martínez Cervantes, remarcó que han cumplido dos objetivos con la quinta edición de la feria. Por un lado, “hacer pedagogía con los niños para enseñarles viejos oficios, con la participación de más de 1.500 escolares”; y por otro lado, el acierto que ha representado el cambio de ubicación para poner en valor el barrio del Castillo.