Desolación en el Molinense tras perder ante el Santomera y quedar fuera de la lucha por el ascenso

El fútbol es imprevisible y se ha vuelto a demostrar. El Santomera está en la final regional del play off a Segunda RFEF tras eliminar al Unión Molinense por 1-2,  pese a que los jugadores de Raúl Guillén jugaron con uno más durante casi todo el encuentro. Pero la superioridad numérica no se notó en el césped del estadio Sánchez Cánovas. Cuando todo apuntaba a una prórroga que, de haber terminado en empate beneficiaba a los molinenses, el Santomera se sacó de la chistera una jugada aislada para llevarse la victoria en el minuto 90 de partido.

El colegiado expulsaba a José Ruiz con roja directa en una acción en la que entendió que el derribo sobre Esteban fue en una ocasión manifiesta de gol. Se quedaba con uno menos el Santomera con 80 minutos por delante, y solo le valía la victoria.

El equipo dirigido por José Francisco Asensio se ha caracterizado este año por no tener miedo a nada y por ser un equipo vertical. Pues en el día clave lo siguió siendo, y encontró el premio. Con diez, alterando el dibujo a un 4-4-1 pero con una actitud igual de ofensiva, el equipo rojillo hizo el 0-1. Balón filtrado a Tiku que se quedó solo ante Hugo Guil; el meta del cuadro molinense solventó el mano a mano, pero Nacho anotó en el rechace.

La alegría, eso sí, no le duró mucho al Santomera porque, pasada la media hora, igualó la contienda el Molinense. Córner botado por Víctor Juliá al segundo palo y ahí apareció imperial Julio Algar para hacer el empate.

La segunda parte fue de dominio molinense, pero sin intención de hacer daño. Más allá de un chut de Parra, un remate desviado de Samu y dos intentos desde campo propio protagonizados por Víctor Juliá y Óscar Zorrilla. El cuadro santomerano se dedicó a estar bien colocado y asustar al conjunto molinense cuando podía.

El miedo de los locales a perder les hizo perder. En una jugada aislada en el minuto 90, Raúl Rubira con el exterior marcó el 1-2, hizo estallar a la mitad del Sánchez Cánovas que estaba teñido de rojo y metió al Santomera en la siguiente fase. La parroquia local quedó desolada porque ya no había tiempo y el Unión Molinense queda eliminado de la lucha por el ascenso a Segunda RFEF.